Cómics por el mundo
El verano está a la vuelta de la esquina y es momento de empezar a pensar en destinos vacacionales a los que poder ir, también es verdad que tenemos ante nosotros lo que puede ser un verano un tanto extraño debido a la situación actual, pero desde aquí se nos ha ocurrido otra manera de viajar: ¿porque no viajar a través de los comics?
No hemos trazado la ruta del viaje, quizás decidamos viajar en autobús, eso sí, esperando que no nos pase como a la joven Clémentine en el cómic de Marko y Beka “El día que el bus volvió a partir sin ella” donde Clémentine, se dispone a realizar una excursión de fin de semana, pero durante un descanso en el viaje termina tirada en una tienda singular en mitad del campo. Sin embargo, esta experiencia le ayudará a encontrar las respuestas a las dudas vitales que tenía en su mente.
Si la opción del autobús no nos convence, tal vez podríamos plantearnos realizar un crucero desde el Mediterráneo con destino Shanghái por ejemplo, como en el que se embarcó Tintín en “Los cigarros del faraón” donde Tintín conoció al egiptólogo Filemón Ciclón quien viajaba en busca de la tumba del faraón egipcio Kih-Oskh. Tintín le acompaña hasta la tumba y allí descubre los misteriosos cigarros, que esconden algo más que tabaco, desde luego puede ser una buena aventura, pero también es verdad que luego fue secuestrado y abandonado en el mar así que habrá que pensárselo bien.
Si nos decidimos por el coche como medio de transporte desde luego tendríamos muchos donde elegir, desde el Citroën 2CV verde de Hernández y Fernández, pasando por el mítico Kitt de “El Coche Fantástico” o incluso el Batmóvil utilizado por Batman. Seguro que con cualquiera de ellos podríamos llegar por ejemplo hasta “La ciudad que no existía” obra creada por Enki Bilal y Pierre Christin en la que una ciudad obrera y desencantada se transformará en la mejor ciudad del mundo y los sueños de todos sus habitantes se cumplen.
Una de la manera más rápida de viajar sin duda sería el avión, pero y si nos pasa como en la obra de José Carlos Fernandes y Robert Gomes, “Mar de Aral” donde el vuelo 713 rumbo a Belice jamás llegó a su destino. El avión fue encontrado dos días más tarde en las profundidades de la selva de Yucatán, cerca de Uxmal. Apenas presentaba daños, pero de la tripulación y de los pasajeros no había ni rastro. En las cajas negras tan solo encontraron historias extrañas que no tenían relación ninguna con lo ocurrido. O como lo que le ocurrió al personaje Céleste Bompard en “La isla de las mujeres” obra de Zanzim en la que Céleste, piloto de gran habilidad y destreza es abatido durante una misión y acaba estrellándose en una pequeña isla. Viendo la trayectoria de los aviones en el cómic, tal vez tengamos que encargar unos paracaídas antes de embarcar.
Si lo que buscamos es viajar ligeros de equipaje, podemos buscar una moto Kawasaki KE-100 como la que el joven Paul de 16 años sueña tener en “Paul en el norte” obra de Michel Rabagliati, donde el autor nos enseña la dura etapa de adolescencia de Paul que junto a su amigo Marc vivirán un verano de 1976 lleno de experiencias importantes, viajes en autostop, veladas entre amigos y nuevas experiencias, todo ello con los juegos olímpicos y la música de Peter Frampton.
Pero si además de viajar ligeros optamos por lo sostenible y ecológico, optaremos por la bici, tal como hizo Eleanor Davis en el cómic “Tú, una bici y la carretera”, la cual estando en un mal momento de su vida, emprende un viaje en bicicleta desde Arizona hasta Georgia. Nosotros tal vez podríamos poner rumbo a Copenhague, e incluso podríamos tener a Mortadelo y Filemón como guías en este viaje puesto que ya conocen la ciudad gracias a su estancia durante “La sirenita”. En esta historia, nuestros guías viajan a Copenhague para presentar el vivimetallinus, el invento del profesor Bacterio que hace que cualquier metal cobre vida, pero accidentalmente se dispara un rayo contra la estatua de “La Sirenita” haciendo que ésta cobre vida y se escape. Deberán capturarla para ponerla en su lugar antes de que el gobierno danés tome medidas.
Bueno tendremos que pensar bien nuestra ruta, pero seguro que será un viaje diferente con el que poder conocer diferentes ciudades de la mano de diferentes cómics y de la diferente visión que cada uno de sus autores nos den sobre dicha ciudad. ¿Nos acompañáis en este viaje? Si os animáis, el siguiente destino será África.