Homenaje a Txarli en las jornadas de Luterl

Luterl es un grupo ya consagrado de difusión y promoción del cómic. Luterl lleva 20 años organizando en Ondarroa jornadas, exposiciones, fanzinez y programas de radio acerca de cómics y dibujantes o creadores de cómics. Estamos en contacto con ellos desde los años noventa en Arteleku, cuando los de Napartheid comenzaron a crear la Fanxinoteka. Desde entonces recibimos en Komikigunea la revista Globho y el fanzine Globhito junto con la información de las jornadas que organiza este incansable grupo.

 

Además, de las publicaciones, también suelen organizar unas jornadas sobre cómics con charlas, exposiciones, visitas guiadas y demás eventos. Este año se centrarán en las obras de Txarli, dando a conocer a este artista local con su primera exposición en solitario ubicada en el salón de exposiciones del ayuntamiento de Ondarroa desde el 18 al 27 de febrero.

 

Según su DNI se llama Carlos Gracia, pero todos lo conocen como Txarli. Nació en Bilbao en 1969, vivió en Portugalete y Trapagarán, también en Getxo y Deusto, aunque hoy en día reside en Ondarroa.

Estudió periodismo, aunque nunca llegó a practicarlo. Ha trabajado sobre todo en producción y en atrezzo para el cine y la televisión, para EITB y La Sexta en concreto. Entre otros, ha trabajado en “Un mundo casi perfecto” (2011), “El precio de la libertad” (2011), una miniserie sobre la vida de Mario Onaindia, “Ander” (2009) y “Un otoño sin Berlin” (2015).

 

Txarli también es un dibujante y sus primeras páginas publicadas se pueden ver en el fanzine Porrot de Eibar, después también ha colaborado en El Tubo, La Gallina Vasca, Prest de Deusto y la revista Kalegorria. Además, sus amigos recopilaron todas sus obras ilustradas en ‘Relatos incomodos’. Además, también a auto-editado junto con Mariola Reigosa ‘Miren Olatu’, dos álbumes sobre una guardiana de los vampiros.

 

Txarli también es conocido por sus trabajos de muralista y grafitis, es un artista multidisciplinar. Se puede ver como maneja el spray en el video-clip de la canción ‘Zertan sinetsi’ del grupo Gatz.