El libro digital

El nuevo Real Decreto-ley 15/2020 aprobado estos días por el Gobierno incluye la medida de reducir del 21 al 4% el IVA de libros electrónicos, revistas y periódicos digitales, equiparando así el tipo impositivo de estos mismos productos al formato papel. La medida busca fomentar la lectura al tiempo que impulsa el consumo de contenidos culturales en formato digital, motivos ambos que pretenden ayudar a la reactivación del sector del libro, o al menos a una parte de él.

La bajada no conlleva, sin embargo, una rebaja automática en el precio final de venta del libro electrónico. Siguiendo las directrices de la Ley 10/2007, de 22 de junio, de la lectura, del libro y de las bibliotecas, y para evitar que grandes franquicias libreras puedan abusar de su posición y compitan deslealmente con pequeñas librerías, son las editoriales las que fijan el precio de los libros, por lo que queda en manos de cada editorial reflejar la bajada impositiva en el precio de venta al público. Algunas grandes editoriales han anunciado ya que la rebaja fiscal afectará al precio, si no de todos, al menos de algunos títulos de su catálogo; su volumen de ventas y la diversificación de su negocio les permiten reducir el margen de beneficio de cada unidad de venta. Pero el caso de las editoriales más pequeñas es, también en este momento, más complicada. En este contexto incierto, es más que lícito que aprovechen este pequeño margen de beneficio para amortiguar las cuantiosas pérdidas que estas semanas de parón generalizado han causado en la venta de libros en papel.

Además de a las pequeñas editoriales, esta medida tampoco beneficia a las librerías, ya que quedan fuera del circuito de venta de libros electrónicos. Esta bajada del IVA de los libros electrónicos no será, por lo tanto, ninguna solución definitiva a la situación de inestabilidad crónica que padece el sector librero. Tendrán que llegar otras medidas que den aire a una actividad permanentemente en la cuerda floja.

Aprovechamos estas líneas para recordar que entrando en el apartado Biblioteca Digital de Koldo Mitxelena se puede acceder desde casa a miles de documentos en formato digital. Como ya presentábamos en detalle en otro artículo anterior, en esta Biblioteca podréis encontrar desde artículos de revistas y periódicos hasta manuscritos, pasando por carteles, vídeos o cómics. Hay, además,  alrededor de 12.000 libros disponibles en formato digital, de los cuales más de un tercio son libros de ficción. Novelas, poemas, relatos y cómics escritos, en su gran mayoría, en euskera, aunque los hay también escritos en castellano, francés, inglés, italiano…

Recordamos, también, que las bibliotecas de la Red de Lectura Pública de Euskadi ofrecen para sus socios/as el servicio eLiburutegia, una plataforma que facilita la lectura de contenidos digitales a través de Internet, así como la posibilidad de ver cine y audiovisuales online. Miles de libros, desde clásicos de la literatura hasta las últimas novedades editoriales, esperando a que nos asomemos a sus historias y nos dejemos llevar.

Además de estos proyectos bibliotecarios, otras iniciativas de ámbito nacional e internacional trabajan en dar acceso a libros enteros digitalizados. Es el caso de Google Books, Proyecto Gutenberg, la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, la web OA Books de libros de acceso abierto u otras como la iniciativa colombiana El libro total: la biblioteca digital de América.

Proyectos del estilo que nos tocan más de cerca son el espacio digital Booktegi, el apartado multimedia de la revista Argia, el repositorio de textos clásicos de la literatura vasca del espacio literario Armiarma o la biblioteca digital Buruxkak de la Universidad Vasca de Verano, entre otros.

Ya veis que no hay excusa, lo difícil es elegir una de entre todas las historias, el resto es sentarnos y disfrutar del viaje.